Escucha, oh, querida, mi voz ahora
Ahora, que los soldados cierran el cielo, y atan las estrellas mas
desordenadas.

Escucha mi voz, ahora.
Ahora que los relámpagos
recortan las siluetas
de los altos miradores
y la sirena ha cesado de aullar.

Escucha, oh, querida, cómo late
mi corazón
y escribe sin pausa
esta canción a medianoche.

Escucha, oh, querida.
Escucha atenta lo que dicen
mis latidos.

Escucha, amada mia, lo que
no puedo decirte
ni escribirte porque me matarian
en cuanto abriera mi boca
para nombrarte.

Escucha, amada mia.
Escucha mi corazón
y recuerda cada noche
y cada mañana
y cada una de las tardes

porque estaré cantando
en cada corazón
de cada pájaro
que se acerque a tu ventana.

@Jorge Palma