¡Un fantasma llamado Apartheid!

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Editorial de PALESTINA HOY 10 de marzo de 2013 Por: Abdo Tounsi – TunSol

¡Un fantasma llamado Apartheid!

Las noticias: “Segregación racial en Israel: calles anchas para judíos, sin pavimentar para árabes”

“La división de la población palestina e israelí ahora no solo se produce en el transporte público, sino también en las propias calles de Hebrón, Cisjordania.”

Suenan los teléfonos en los departamentos gubernamentales de todo el mundo…Saltan las alarmas en las sedes de las ONGs defensoras de los DDHH de todo el mundo…  Es un ir y venir de trajeados por las galerías de los centros de la ONU en todo el mundo. Se presentan los cazafantasmas como último recurso, después de recibir una llamada del secretario general Sr. Ki-moon  desde la sede central en Nueva York. A todo esto, entonces se presentó alarmado por las llamadas de su jefe de seguridad el señor secretario general, al que no le dio tiempo de cambiarse, eran las tres de la madrugada y llevaba  su Kimono de color rojo con el dibujo del yin y el yang… secretarias y vigilantes se agrupan en una puerta que da a un pasillo oscuro mirando con asombro.

Por fin llegan los cazafantasmas hasta la mismísima puerta donde todo el mundo señala haber visto el fantasma… ¡fantasma! ¿Quién dijo fantasma?, aquí de lo que se trata es de limpiar el mal olor del despacho del Sr. Ki-moon y los hombres vestidos de azul con utensilios en la mano, son los hombres de desratización y la persona del kimono es la mujer de limpieza que está histérica después de haber visto una rata enorme… ¡rata! ¿Quién dijo rata?, aquí no hay nada de eso, es la perrita de la señora del embajador de Japón que lleva un kimono que el señor embajador quiso comer en su despacho un sushi y se lo trajo la señora y es medio día, no son las tres de la madrugada… vámonos, es falsa alarma.

Suena el teléfono en el despacho del Sr. Ki-moon y se oyen carcajadas al otro lado del hilo… Señor SG… ¡qué risa señor! me acaban de comentar que Ud. se presentó a las tres de la madrugada alarmado porque se ha visto un fantasma en su despacho… ¿es cierto? Le preguntaba la embajadora de EEUU ante la ONU… Por favor señora Rice, ¿¡no habrá creído tal bobada!?… Pero señor secretario, no tiene por qué avergonzarse, me dijeron que estaba Ud. muy mono con su kimono… Basta de tonterías señora embajadora, aquí solo hubo una cosa, es que el embajador de Palestina Sr. Mansur se presentó con un requerimiento para que el Consejo de Seguridad se reúna para una resolución contra un tal Apartheid… Bueno, bueno Señor Ki-moon le dejo entonces, pero antes dígale al Sr. Mansur que no se presentan demandas contra fantasmas, la ONU es una institución muy seria, adiós.

Sr. Mansur, me dicen en el departamento de personal que el tal Apartheid no trabaja para nosotros y no se le conoce presencia por aquí, por qué no pregunta por Sudáfrica, al parecer la última vez se le vio merodeando por esa tierra. Si quieres te doy el teléfono de un tal Mandela que dice haberlo visto. No gracias señor secretario general, las llamadas a ese país cuestan mucho y andamos con los dineros confiscados por el Estado que nos ocupa la tierra, ¿habrá oído de él?… Sí, señor embajador tengo media planta llena de archivos de demandas sobre ese Estado. Pues precisamente Señor Ki-moon él es el Apartheid que anda disfrazado de señor democracia… Ande, ande señor Mansur no me coma Ud. el coco con historias para no dormir, luego mi señora me regaña porque me llevo trabajo a casa… Bueno Sr. SG, iremos a ver si en el Tribunal Penal Internacional tienen un remedio para el mal Apartheid. Adiós.

Después de salir del despacho el embajador de Palestina, el Señor Ki-moon telefonea a la Sra. Rice y le comenta lo sucedido y la señora le contesta: bien hecho Sr. SG. Estos palestinos ven fantasmas por todas partes, debe ser porque llevan miles de noches sin dormir bien y comen mal, algo habría que hacer con ellos, a ver si mi presidente ahora que piensa ir a su casa, les lleva algo de comer. Un saludo señora y no se olvide de mi sueldo que este mes me han retrasado el pago porque Uds. no han abonado lo que deben, por la tontería de la UNESCO… Descuide Señor Ki-moon se lo mandaré la próxima vez directamente con el embajador de Israel… Adiós